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Lamborghini lleva a cabo un proyecto de sostenibilidad ambiental, desde 2009, en Italia. Tanto empeño le han puesto que, en 2015 ganaron la certificación neutra de CO2.
Aunque es parte integral de una gigantesca estrategia comercial, este proyecto de protección ambiental, incluye a todos los productos y modelos, lo cual, admitamos, lo hace noble. "El fin justifica los medios"...
"Los sistemas fotovoltaicos son una agrupación de componentes que transforman la energía solar en eléctrica. Esta tecnología puede usarse en redes convencionales para casas, negocios o inclusive, industrias. Ésto produce una media de 2 millones 500 mil kilovatios hora de electricidad al año. Equivalente al consumo anual de energía eléctrica de 530 apartamentos de 100 metros cuadrados". (www.primicia.ec)
Lo sorprendente de esta noticia es la particular manera de detectar contaminantes ambientales que está usando el gigante automovilístico: ha instalado en su predio de 14.600 metros cuadrados, 13 colmenas con 600 mil abejas. Sí. Escuchaste bien.
Los expertos analizan la miel, cera y los insectos para detectar contaminantes ambientales en la planta de producción. Adicionalmente, tres de las colmenas están destinadas a la producción de miel que se distribuye a los empleados del centro.
Todos los residuos que la producción de estos autos magistrales ocasionaba, iban a parar a vertederos. Para evitarlos, ahora Lanborghini usa la economía circular, dándoles una segunda vida útil , en lugar de desecharlos.
Todos los restos de cuero que sobran de la fabricación de la cabina, ahora dan nacimiento a sub-productos.
"Lamborghini es la primera empresa italiana automotriz en tener una red de calefacción urbana. Este sistema suministra anualmente 2 millones 500 mil kilovatios hora de energía térmica. De hecho, esta cifra llega a calentar 156 apartamentos de 100 metros cuadrados". (www.primicia.ec)
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