Cuenta la leyenda que, Christopher Sholes inventó la máquina de escribir, en 1873.  Su hija Lilian,  probó la creación de su padre, convirtiéndose así en la primera mujer dactilógrafa de la historia. Fue un 4 de septiembre.

El invento de la máquina de escribir,  se originó en realidad, mucho antes: en el año 1714, cuando el inglés Henry Mill patentó una ”máquina artificial, capaz de volcar cualquier escrito en papel”.  Sin embargo,  la historia le adjudica a   Cristopher Latham Sholes, el invento de  la máquina de escribir en 1868.

En 1873, Sholes decidió firmar un contrato con un armero en bancarrota para que reprodujera el modelo. El visionario se llamaba Remington, quien fue el primero en intentar la utilidad comercial del invento creado por Sholes, a la que bautizó como ”Remington”.

En ese tiempo, Liliam Sholes y una de las hijas de Remington se dedicaron a promocionar el nuevo invento, siendo las pioneras de las secretarias actuales.

Sholes hizo docenas de experimentos e inspirándose en el funcionamiento de las teclas de piano,  consiguió crear una máquina que podía teclear el alfabeto entero (solo letras mayúsculas), números y signos de puntuación.

Si bien tenía el problema de que se le atascaban las teclas, sacó la patente del invento el 23 de junio de 1868 en Estados Unidos, con el nº 79.265. No fuera a ser que alguien le robara la idea...

En 1874 Remington empezó la producción industrial su fábrica de Ilion (Nueva York), bajo el nombre de Sholes and Glidden y a un precio de 125 USD. Al principio no tuvieron muchas ventas porque los agarró la depresión nacional (algo como la crisis económica de ahora).

Además la máquina tenía algunos fallos. Las letras no quedaban alineadas en el papel, el rodillo dejaba restos de tinta en el papel y las teclas se atascaban.

En 1886 rebautizaron la máquina de escribir como Remington Rand. El éxito fue brutal. La hija de Sholes, Lilian, se hizo experta en escribir con rapidez, lo cual maravilló al mundo.

Hoy, 4 de septiembre, le dedicamos este día a todas las Secretarias quienes, desde tal vez un bajo perfil, hacen que el mundo de los negocios evolucione.

¡Feliz Día para todas!