Ahorrar para la jubilación: ¿mito o realidad?
Encontrar una forma o un producto que nos ayude a ahorrar y rentabilizar el dinero para un futuro más lejano no siempre es tarea fácil. Fondos, depósitos, una simple cuenta bancaria de ahorro, planes de pensiones... a decir verdad la oferta es amplia pero las opciones son pocas.
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Son muchos los argentinos que todavía no se lanzan a contratar una jubilación privada (o seguro de retiro) porque sostienen, entre otras razones, que tendrán suficiente con la pensión pública del Ansés y, por consiguiente, no lo ven necesario, sin tener en cuenta que, nuestro presente y futuro es la directa consecuencia de nuestras decisiones en el pasado.
Ésto sucede además en un contexto en el que la preocupación por la jubilación ha aumentado, ya que siete de cada diez argentinos todavía no han empezado a ahorrar para el momento de retiro.
El segmento de los jóvenes entre los treinta y los cuarenta años es el que debería estar ocupándose al respecto, dado que, en la Argentina, se necesita el cumplimiento efectivo de dos variables, para que puedas jubilarte: tener 65 años cumplidos (60 años para la mujer) y treinta años de aportes previsionales.
Veamos ahora si los mitos son mitos:
¿Por qué pensar en una jubilación privada paralela a la de Ansés? Porque la historia argentina cuenta un relato temerario:
. Décadas atrás, muchos vimos cómo nuestros ahorros en las AFJP iban a parar cautivamente al pozo solidario del Ansés.
. No es para nada desconocido que, esta Institución es la "caja chica" del gobierno de turno, produciéndonos una inseguridad suicida.
. Autónomos y monotributistas, al momento de jubilarse, luego de una vida entera de trabajo, cobraremos la mínima que hoy, no alcanza a cubrir la canasta básica.
. Un preso cobra un sueldo mayor al jubilado autónomo.
. Si aportaste 40 años (porque laburaste desde muy joven), no se tendrán en cuenta al momento del cálculo jubilatorio. O sea, fuiste alpiste...
. Para el cálculo del cobro de tu jubilación, cuentan solo los últimos diez años...
. No olvidemos que, nuestra calidad de vida en la tercera edad, cuando uno debe gozar del premio de treinta años de trabajo abnegado, depende ,en cambio, de los devaneos del gobierno de turno, quien decide a mansalva, cómo actualizará el importe anualmente. O sea: no decidís sobre tu vida. Decide el gobierno del momento.
. La edad: Al escuchar la palabra jubilación, muchos lo ven tan lejano que piensan que ahora mismo no tienen que preocuparse por ello, ya que existen otras prioridades. Sin embargo, cuanto antes se empiece, mejor preparado se llega a ese momento. Y creeme: llega.
. Aunque la principal finalidad de un plan de retiro es complementar la jubilación pública, hay algunas situaciones que permiten recuperarlo antes.
En primer lugar, el dinero puede retirarse a los 10 años sin necesidad de cumplir ningún requisito especial.
. Por último, la procrastinación hace estragos con el paso del tiempo.
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